Urretxu, 15/03/2015.
El domingo, a las 16:30, en Eire taberna, se disputaron las finales de XVI Eire-Bankoa, edición que se recordará por el increíble seguimiento. Nunca un deporte minoritario tuvo tanto seguimiento. El público se fue congregando. Nadie quiso faltar a la fiesta. Nadie salió defraudado. Los finalistas habían preparado concienzudamente las partidas
Por el tercer y cuarto puesto jugaron Aníbal Fernández (Azkoiti) contra Xabi Ruiz (Getaria), que jugó una apertura Tartakower. Ruiz ideó un plan para cambiar alfiles blancos, pero este plan ayudó a Aníbal. Pese al cambio, se convirtió en el dueño absoluto de las casillas blancas, se vio forzado a que la partida la disputara en un espacio muy reducido, con movimientos muy contados. Fue una partida, que desde el principio, estuvo condenada para Xabi Ruiz. Tras perder un peón, llegó la jugada definitiva, blancas ganaron calidad, y se vislumbró un mate en dos inevitable, por lo cual Ruiz tras comprobarlo, optó por abandonar.
La final inédita, enfrentó a Egoitz Irure (Zestoa) y a Aitor Gallastegi (Elorrio), que se decidieron por una apertura española del cambio. Apertura tranquila con temprano cambio de damas. Las negras no pueden conservar la pareja de alfiles y tiene peor estructura pero logran ganar un peón, aunque muy débil. Las blancas se defienden bien y el negro tiene que repetir jugadas para no perderlo, sino quedarían peor. Tablas.
Se cambiaron los colores, pero a 15 minutos por jugador.
Gallastegi, cuando salió, jamás imaginó, que aquel gambito de dama aceptado, en la que el negro intentó conservar el peón de c4, defensa eslava, se convirtieran en una partida muy loca, que pese a que el rey negro acabó en posiciones muy poco ortodoxas, tuvo en sus manos la partida. Gallastegi ganó pieza. Todo apuntaba a que el de Elorrio, en su segunda final disputada, conseguiría el entorchado, la partida parecía que estaba lista para sentencia, pero, no. El final debió ser sencillo, pero los apuros de tiempo, la tensión de ser una final y los nervios de acero de Egoitz lograron que Aitor calculase mal el final y desperdiciara esta gran oportunidad. La verdad que con apuros de tiempo es muy difícil calcular todas las variantes. Se llegó a un final de dama contra peón que son tablas teóricas. Iriberri destacó el pundonor de Irure, que aguantó una posición terrible, sin descomponerse, unas tablas gloriosas, que, en definitiva, son las que dieron el título a Irure, en la tercera partida.
El público que no se lo cree, gozando a lo grande, haciendo verdaderos ejercicios para meter la cabeza. Es imposible ver una final más emocionante. El interés creciendo, no cabe un alfiler. El segundo desempate,fue una apertura escocesa en la que Egoitz empleó una variante secundaria y "cazó" a Aitor en plena apertura. Ya en el movimiento 7 y posteriormente en el 8 las blancas tienen la partida ganada, pero sorprendentemente Egoitz tampoco está fino. No jugó lo más fuerte, así que la partida se complicó muchísimo; más con los apuros de tiempo de ambos (recordemos que era una partida a 5 minutos por jugador). Así que posición complicadísima, con ventaja blanca y el tiempo que se convertiría en juez. A Egoitz, que siempre había ido un poco mejor de tiempo le quedaban unos 45 segundos cuando el reloj de Gallastegi acabó en 0. 1-0 Irure Campeón. “En realidad, a 5 minutos, es una lotería”, manifestó Txema Iriberri. Irure conseguía así su segunda txapela Eire.
Posteriormente se celebró la entrega de trofeos. Iriberri estuvo acompañado por Carlos Montero, director de la sucursal de Bankoa, en Zumarraga, y por Jorge Andueza, “PITU”, concejal de Deportes, en representación del ayuntamiento de Urretxu.
El mejor local fue para Joseba Urdangarin. Segundo, Unai Elías. El podium de honor quedó de la siguiente manera: 1º Egoitz Irure, 2º Aitor Gallastegi, 3º Aníbal Fernández y 4º Xabi Ruiz.
Iriberri concedió el Trofeo Eire, un premio muy valorado, que se creo para agradecer a las personas que más contribuyen en la difusión del ajedrez, a Jesús Mari Rodríguez, 7 veces campeón del Eire, por su contribución, apoyo e inestimable ayuda en la difusión y organización de este torneo, una señor, siempre dispuesto a echarte una mano. Además, con su concurso, el Eire-Bankoa subió de nivel y de prestigio, abriendo la espita para que otros grandes jugadores lo disputen.
Iriberri también tuvo palabras de agradecimiento para los participantes, medios de comunicación, Santikutz, Goierri, Buta-k 21, Gazte Asanblada, Federación Vasca de Ajedrez y para todos aquellos que de una manera u otra han hecho posible que se haya celebrado esta XVI edición. Palabras de agradecimiento especiales tuvo para Bankoa, que pese a la que está cayendo, a la grave crisis, una vez más ha vuelto a apostar por nosotros.
Y esto es lo que dio esta XVI edición del Eire-Bankoa. Ya falta menos para que comience la XVII.
*Foto arriba izq.: Egoitz Irure - Aitor Gallastegi
*Foto arriba dch.: Egoitz Irure - Aitor Gallastegi
*Foto medio Dch.: Carlos Montero, Jorge Andueza, Egoitz Irure y Txema Iriberri.
*Foto abajo Iz.: Entrega del trofeos al campeón.
*Fotos abajo: Entrega del trofeo Eire.
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